Sibenik - Sibenik (7 días - 146mn)

La bella ciudad de Sibenik, situada al norte de la región de Dalmacia y muy cerca del estuario del río Krka, es una de las joyas dálmatas que merece una visita aunque suele pasar desapercibida para la mayoría de los turistas. Sus calles, estrechas y empedradas, transportan directamente a la Edad Media y además guardan un tesoro histórico: la catedral de Santiago, declarada Patrimonio Mundial de la Unesco. Fue construida entre los siglos XV y XVI por Giorgio Orsini, discípulo de Donatello y que trabajó en la construcción del Palacio Ducal de Venecia. Tras recoger tu barco de alquiler, puedes recorrer su casco histórico y después disfrutar de algunas de sus majestuosas playas, como la de Banj a escasos minutos del centro urbano. Desde ella se tienen unas maravillosas vistas de la Fortificación de San Miguel y el Canal de San Antonio.

El pequeño y tranquilo puerto de Skradin y su playa azul turquesa es prácticamente la puerta de entrada al Parque Nacional de Krka. Multitud de tiendas y puestos de mercadillo alrededor del puerto harán las maravillas de los amantes de las compras. El shopping permite al visitante deleitarse con las casas de colores que inundan las calles de esta tranquila localidad. Tras comprarse alguna de las maravillas de la artesanía local y darse un baño, desde Skradin puede visitarse el Parque Nacional de Krka. Os aconsejamos amarrar el barco o catamarán de alquiler en el puerto, o darle un descanso a la tripulación del barco, y comprar unos tickets para hacer la excursión en barco por el río Krka con visita a sus legendarias cascadas. El paseo por el Parque Natural de Krka dura unos 45 minutos y te puedes bañar entre sus impresionantes caídas de agua.

La pequeña isla de Kaprije pertenece al archipiélago de Sibenik. Esta porción de tierra tiene siete kilómetros de superficie y es un enclave perfecto para la práctica del submarinismo puesto que en sus aguas se encuentran numerosos barcos hundidos. Su oferta gastronómica es otro de sus atractivos junto a la familiaridad de sus escasos habitantes y los paisajes de bosques y vides enmarcados por el turquesa del mar. Además es un enclave perfecto para fondear nuestro barco de alquiler y pasar la noche ya que se trata de un lugar muy resguardado de vientos y mareas.

Si la leyenda cuenta que a Dios, tras haber creado el mundo, le sobraron un gran número de rocas que decidió tirar al mar. Y que tras mirarlas, se quedó pensando y concluyó que era perfecto, que las dejaría tal cual y que esto dio lugar a las islas Kornati, nos podemos hacer una idea de la extrema belleza del paisaje. La isla más grande de este archipiélago es Kornat, en la que se encuentra dentro del Parque nacional  de la Kornati. Playas de arena blanca con bosques de pino inundando las 147 islas que conforman este archipiélago son un argumento irrefutable para visitarlo.

Sali es un pueblecito pesquero encantador en la isla de Dugi Otok, la isla más grande de Dalmacia del norte. No es uno de los enclaves más turísticos del país y por ello se puede disfrutar de la calma y la paz que reinan en este pintoresco pueblo que permanece a resguardo de las hordas de turistas. Por favor, no dejéis de disfrutar de una deliciosa bebida al atardecer a bordo de vuestro velero de alquiler. Si os decidís a visitar Sali en verano, podréis uniros a las fiestas que se celebran en la localidad.

La exuberante isla de Molat es un paraíso para los navegantes y amantes de la playa. Es un verdadero remanso de paz y tranquilidad que ha logrado dar esquinazo al turismo de masas. Posee una gran cantidad de calas naturales y playas espectaculares que esperan ser descubiertas. Se trata de un paraje ideal para  que viajan en barco con niños que desean bañarse en las tranquilas aguas cristalinas del Adriático.

Murter es la ciudad principal de la isla del mismo nombre. Su gran atractivo reside en las callejuelas de piedra abovedadas, las sencillas casas y los muros de piedra cubiertos de enredaderas en el núcleo histórico, que destilan parte de su historia como zona de verano de las clases ricas del Imperio Romano. Cuenta con una acogedora marina en la que podemos amarrar el barco y disfrutar de las playas de la población y perdernos por sus calles para despedir nuestra ruta por las islas Kornati antes de volver a Sibenik y hacer el check out del velero, yate o catamarán de alquiler que nos ha acompañado por esta maravillosa ruta.

*La ruta indicada es sólo orientativa, cualquier error en el contenido, no será motivo de reclamación. Si quiere visitar otros lugares, la ruta puede ser modificada en función de sus preferencias. En caso de alquilar una embarcación con patrón, éste podrá decidir cambios en el itinerario previsto por causas imprevistas y/o ajenas a la organización*