Comenzamos nuestro itinerario en Marmaris, un importante destino turístico situado en el suroeste de Turquía, en la provincia de Mugla. La ciudad cuenta con dos puertos deportivos importantes y varios más pequeños, lo que hace que sea una de las ciudades turcas con más solicitud para alquilar veleros, catamaranes, goletas o yates. Hasta hace solo unas décadas Marmaris era una pequeña aldea de pescadores, pero hoy es un importante centro de ocio que invita a pasear tranquilamente por su paseo marítimo repleto de bares y restaurantes o, si se prefiere, a disfrutar de todo el ambiente de la noche turca, ya sea tomando una copa en alguna de sus terrazas o asistiendo a espectáculos de danza del vientre o bailes folklóricos turcos. Muy cerca del puerto hay también una área cubierta de bazar que vale la pena visitar si lo que nos apetece es hacer unas compras.

Descubrir Ekincik desde el mar, después de navegar en velero, es una experiencia que nos dejará sin habla. Ante nuestra vista aparecerán impresionantes acantilados rojos rodeados de cerros arbolados, una área de naturaleza virgen de extraordinaria belleza. Un lugar con poca gente, bonito y tranquilo, con una playa pequeña y atractiva cerca. ¿Qué más se puede pedir? ¿Quizás unos baños termales? Pues solo tendremos que hacer una excursión de 20 minutos en coche pera llegar a los baños de Sultaniye, situados en la costa sudoeste del lago Köycegic, cuyas aguas termales a 40 grados centígrados se utilizaban ya en tiempo de los romanos.

Desde Ekincik navegaremos hasta Göbün Cove, la primera cala en la bahía de Fethiye, comenzando desde el sur. Una buena manera de disfrutar de unas espectaculares vistas sobre la parte final de la bahía es caminar hacia la parte alta de esta cala. Y si la caminata nos abre el apetito, de vuelta en la misma cala podemos encontrar deliciosos platos que se preparan con pescado fresco, carnes de pollo y cordero. Si hemos alquilado un barco con tripulación, incluso podemos disfrutar de la gastronomía turca a bordo.

Fethiye, la antigua Telmessos, es uno de los pueblos litorales más hermosos de la Costa Turquesa y también uno de los más visitados. Miles de turistas acuden en masa cada verano atraídos por sus hermosas playas: Oludeniz, Calis -donde podremos disfrutar de una buena comida en alguno de sus chiringuitos-, Playa de Patara... Si no estamos cansados de navegar podemos descubrir en barco la bahía de Fethiye recorriendo los doce islotes que hay en los alrededores. Podemos hacer compras en el bazar que hay en el área de Paspatur o si lo preferimos, descubrir las ruinas del antiguo Telmessos, donde se encuentra la tumba de Amyntas, rey de los licios, y los restos de la fortaleza bizantina.

En el camino de vuelta volveremos a fondear en Ekencik, una parada popular de todos los barcos que navegan de Marmaris a Gocek o Fethiye. Muy cerca se encuentra la desembocadura del río Dalyan, que se puede remontar en una barca alquilada para visitar la ciudad del mismo nombre y las ruinas de Caunos.

El nombre significa Bahía de Arena, no en vano tiene una de las mayores extensiones de playa en la península. Incluso en pleno verano siempre hay un montón de espacio en la playa. Las aguas son limpias y claras, de un turquesa que hace honor al nombre de estas costas.

Fin de viaje y fin de una experiencia inolvidable: una hermosa costa, gente amable, exquisita gastronomía y deliciosos vinos locales que nada tienen que envidiar a los de otras zonas vinícolas de la cuenca mediterránea. ¿Se te ocurre una receta mejor para disfrutar de tus vacaciones? ¡Apúntate ya y sal a navegar!